Practicar yoga es una forma divertida de desarrollar habilidades de niños y adultos en un entorno positivo y sin competencia. Además, la calma y bienestar que se logran es importante para el desarrollo físico y emocional de los niños, ya que les ayuda a relajarse y divertirse.

Los niños aprenden a respirar de forma correcta y profunda. Esta técnica mejora el funcionamiento del aparato respiratorio y calma la mente, porque cuanto más tranquila y regular es la respiración, más se calman los pensamientos ¡y los adultos también!

Antes de empezar a practicar yoga con ellos, es bueno hacer una pequeña reflexión:

• Los niños, en su constante dinámica de movimiento, se interesan mucho más en las asanas a través del juego, quizás porque están aprendiendo a mover y controlar su cuerpo y todo parece un desafío.
  
  
• La experiencia de yoga en niños debe ser desafiante y entretenida a la vez, pero nunca exceder los límites propios de cada edad.
  
  
• Nuestra misión es acompañarlos, incentivarlos a no perder la paciencia y a tolerar la frustración, para que logren las posturas por sí mismos.
  
  
• Ayúdalos a guiar el trabajo psicomotriz coordinando los movimientos, primero por si solos y después con la respiración.
  
  
• Si vas a trabajar con secuencias de asanas y tarjetas de yoga, primero intenta memorizarlas tú, luego ordena las tarjetas cerca del niño en el orden en que las van a hacer, dirígelo y anda probando como les va. Seguramente, vas a tener distintas respuestas dependiendo de su estado de ánimo y del tuyo… aprovecha tu sentido del humor, disfruta e improvisa.
  
  
• Podremos trabajar las asanas en secuencias o bien por separado, pero en ningún caso incentivaremos a mantener posturas que le provoquen dolor porque debemos respetar sus límites, promover el autoconocimiento y el respeto por su cuerpo.

Finalmente, siempre es bueno recordar que cada niño es único, aprenderá y experimentará las sensaciones de forma diferente. Eso es yoga🙏🏻.

 Quieres una secuencia de yoga para jugar con ellos ¡tenemos una aquí!